Las sesiones online “Baila en Casa” han sido una experiencia para conocer y sanar la casa, explotarla, bailarla, llenar de movimiento mi espacio más íntimo y verlo desde un lugar de creación y amor. Con Marina he aprendido a habitar mi casa-cuerpo, a bailar desde la investigación, consciente de mi sentir, a sanar con el movimiento, a liberar y conocer más mi cuerpo. Para mí Marina es guía y acompañamiento sin juicio, empatía, confianza, cuidado y amor por lo que hace y nos lo transmite al facilitar el proceso para que conectemos con la casa-cuerpo tanto de manera offline como online.

La clave de Marina como facilitadora es la libertad y el mimo con el que nos cuida, el respeto y la búsqueda constante. El material que he trabajado en las sesiones online con Marina, se quedó de alguna manera en parpadeo, y de pronto sentía ganas de bailar mientras tendía la ropa, o con mis hijos en rutinas cotidianas. Trabajar con Marina para mí ha sido un despertar, profundo y necesario, la clave de un cambio brutal y consciente.

Bailar con Marina ha sido una experiencia de empoderamiento utilizando mi cuerpo como herramienta y mi alma como motor creativo . Tomar conciencia de mi cuerpo y encontrar mi propio movimiento ha sido toda una experiencia. Siento que gracias al trabajo con Marina he aumentado mi autoestima, me he podido visibilizar,dar voz y aceptar al bicho raro y auténtico que hay dentro de mi, el cual se ha convertido en mi mejor amig@ y aliad@.

De Marina destaco su voz, no solo literalmente sino como una presencia vital de sensibilidad con una visión integradora que nos lleva a otros mundos, a mirar hacia adentro y volcar hacia afuera, a mirar las ventanas y las puertas como medios de conocimiento. A veces los techos y las paredes y las mesas y sillas como puntos de apoyo para seguir investigando. Y lo más importante encontrar en las palabras las redes de soporte y continuidad de un lenguaje metafórico a veces realista y a veces agradecido, como cuando hoy la palabra GRACIAS, adquiere otro sentido más allá del formal, y contigo desarrollar una unión en igualdad y sabiduría milenaria y ancestral.

Me sentía bastante tímido, rígido y desconectado de mi cuerpo. Sentía mi físico como algo que yo tenía, no como algo que yo era. Trabajar con Marina ha sido una exploración de mi ser en un viaje sin límites, sin aspiraciones y sin juicios. Tengo la sensación de que Marina no está y, a la vez, está muy presente; una parte del viaje se hace a un lugar tan profundo que cuesta reconocerla como algo externo al propio viaje. Sin moverte de tu casa puede llevarte a sitios que no lograrías alcanzar ni dando la vuelta al mundo.​